Más de siete semanas demora el sistema público en pagar licencias médicas
Ermy Araya |
La Nación |
El 28 de septiembre pasado, Claudio, ingeniero en informática, no aguantó más los dolores a la espalda y tras un par de exámenes, un médico determinó que debía hacer reposo por cinco días. Era primera vez que un especialista le daba una licencia, que debido a los agudos dolores se extendió por otros cinco días. La empresa derivó el documento a una caja de compensación. Todo iba bien, hasta que preguntó cuándo le darían fecha de pago.
“Me dijeron en la Caja que la ingresaron a la Compin y cuando llamé a este último lugar, me dijeron que no ha ingresado ninguna licencia a mi nombre. O sea, nadie sabe dónde está mi permiso”, cuenta Claudio.
De ahí en adelante, todo ha sido excusas, derivaciones a cuanta oficina de reclamos existe en Santiago y trámites varios sin ninguna respuesta. “Estoy reclamando por un dinero que me pertenece. Además, es primera vez que me tomo una licencia… ¡Para nunca más!”, dice molesto.
Su caso no es una excepción. La demora en el pago de licencias médicas en el sistema público puede alcanzar en promedio siete semanas o más.
Una situación que preocupa a las autoridades, ya que las isapres lograron bajar el tiempo de este trámite de 11,6 días en 2005 a 9,6 días este año.
Mejorar el sistema
El decreto supremo Nº 3 del Ministerio de Salud es claro al respecto: la licencia médica (subsidio de incapacidad laboral) se pagará, por lo menos, con la misma regularidad que la remuneración, no pudiendo exceder el período de un mes.
“Reconocemos una demora. El 15% de los reclamos que recibimos son de afiliados que tienen problemas con su licencias y reciben el dinero después de 30 días. Las regiones con más problemas son la Octava y la Metropolitana”, afirmó el director de Fonasa, Hernán Monasterio.
El personero aseguró que las causas de esta postergación se deben a que el sistema no está funcionando bien. “Existe la necesidad de mejorar y controlar la entrega de licencias, agilizando la tramitación de éstas. El problema es que nosotros no somos responsables de ese pago sino que las Compines que también fiscalizan. Son juez y parte y eso hay que cambiarlo”, advirtió.
Tanto la Subsecretaría de Salud Pública como Fonasa, ya están tomando cartas en el asunto. En plena redacción se encuentra un documento que permitirá pagar las licencias a partir del próximo año con vales vista, depósitos en cuentas corrientes o bancos que tengan convenio con Fonasa.
“Debiera existir un organismo que fiscalizara, autónomo de Fonasa y las isapres, y que además evalúe los pagos de las licencias. Mientras tanto, le propondremos al Ministerio de Salud que seamos nosotros los que nos hagamos cargo de pago directo a los usuarios”, agregó Hernán Monasterio.
Otra medida que pronto se implementará, es la de reunir a todas las contralorías médicas que se ubican actualmente en los policlínicos de los hospitales, en una sola oficina que podría ubicarse en el centro de Santiago.
Aún se está evaluando si partir con un plan piloto que fusionaría los servicios de Salud Metropolitano Central y Sur Oriente, para concentrar en un solo lugar los reclamos o comenzar con el nuevo sistema a nivel nacional.
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