Argentinos exigen "juicio y cárcel" al cumplirse 33 años del golpe

Agencias

Si bien los actos por el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y Justicia se desarrollaron con tranquilidad, en Neuquén se lanzaron molotov contra cuartel militar.

MOLOTOV EN NEUQUÉN Si bien los actos se desarrollaron con cierta tranquilidad se produjeron algunos incidentes en la provincia de Neuquén, cuando un grupo de jóvenes encapuchados atacaron con bombas molotov, incendiando de las persianas de madera y de las puertas del edificio del Comando de la Sexta Brigada del Ejército. Según informó el diario local Río Negro, otro grupo tiró abajo una de las rejas del establecimiento militar e ingresaron arrojando piedras. Luego, llegó la policía por una de las calles laterales y disuadió a los manifestantes con balas de gomas. Los manifestantes pasaron, como todos los años, por la puerta de la entidad gritando contra los militares y pintaron con aerosoles consignas y la frase "Asesinos". El Comando de la Sexta Brigada del Ejército fue, durante la dictadura, uno de los lugares donde acudían los familiares de los desaparecidos a buscar a las víctimas secuestradas.

Miles de personas se congregaron ayer en varias ciudades de Argentina para manifestarse contra los 33 años del golpe de Estado que instauró un régimen militar que se mantuvo en el poder hasta 1983. 

En el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y Justicia, decenas de organizaciones de derechos humanos, partidos de izquierda, entidades sociales y estudiantes marcharon en Buenos Aires a la Plaza de Mayo, donde se encuentra la Casa de Gobierno, para exigir la agilización de los juicios contra los violadores de los derechos humanos.

Los manifestantes renovaron su llamado de "juicio y cárcel común a todos los genocidas" días después de la polémica desatada entre la Corte Suprema de Justicia de Argentina y el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, que exigió celeridad en las causas contra los represores y sanciones para los jueces que son ineficaces y dejan libres a los delincuentes. 

A raíz de la polémica, el gobierno argentino y el máximo tribunal del país acordaron la reasignación de más de nueve millones de dólares del presupuesto judicial, lo que permitirá crear unos 750 cargos laborales con los que se pretende reducir los tiempos de tramitación de los juicios.  

Las causas se reactivaron en 2003, cuando el Parlamento anuló las leyes de Punto Final (1986) y Obediencia Debida (1987), que habían librado de responsabilidades a más de un millar de represores.  

"Las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo piden que hoy tengamos esa justicia", aseguraron voceros de la movilización, mientras las mujeres de pañuelo blanco portaban una extensa bandera con los rostros de sus hijos, desaparecidos durante la dictadura.

Según los organismos humanitarios, el número de desaparecidos se eleva a 30.000, pero oficialmente solo se reconocen unos 18.000.

En la actualidad 1.254 personas están involucradas en causas vinculadas con el terrorismo de Estado, aunque "poco más del 40% están procesados y apenas 48 fueron condenados", según un informe del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS).

Las organizaciones de derechos humanos también reclamaron la "aparición con vida" de Jorge Julio López, convertido hace 30 meses en el "primer desaparecido en democracia" luego de haber sido un testigo clave en el juicio contra el represor Miguel Etchecolatz, cuya condena a prisión perpetua fue ratificada por la Corte Suprema de Justicia, según informaron hoy fuentes judiciales.

"El 24 de marzo es una fecha en la que se atacó y se quiso destruir la patria y donde hubo miles de hombres y mujeres que la defendieron con su propia vida", sostuvo la presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini.

 

FOTO: Las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo encabezaron los actos por el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y Justicia.