Investigan en Chile corrupción en gobierno de Piñera

Las sospechas de corrupción por un caso de compra de equipos para control de drogas 400 por ciento por encima de su precio real, y que fue efectuado por un departamento del Ministerio del Interior de Chile se ha transformado en un nuevo dolor de cabeza para el gobierno de Sebastián Piñera.

Las acusaciones por corrupción no se hicieron esperar en el seno de la oposición chilena.

A consecuencia del escándalo, dos funcionarios de alto nivel del Ministerio del Interior relacionados con temas de seguridad ciudadana presentaron su renuncia, mientras las autoridades iniciaron una investigación por el caso.

Incluso la policía acudió hasta las dependencias del Ministerio del Interior para decomisar computadoras como parte de la investigación y ante la posibilidad de que funcionarios del sistema público hubieran aceptado pagos para interceder por una empresa para que ganara una licitación.

El caso comenzó cuando un medio local por Internet (el Centro de Investigaciones Periodísticas), reveló que la Unidad del Crimen Organizado de la División de Estudios del Ministerio del Interior compró con sobreprecio equipos antidrogas a la empresa Tecnodata.

El artículo revelaba que luego de una licitación pública a través del sistema de Compras del Estado (el sitio web Mercadopublico.cl), se estableció que los equipos fueron ofrecidos a 400 por ciento de su valor real en el mercado.

Más aún, la orden de compra -según los documentos hechos públicos por la Ley de Transparencia- señalaban que se dio cinco minutos después de adjudicado el proceso de licitación, saltándose una serie de pasos burocráticos y de control.

Las acusaciones se dirigieron primero al jefe de la Unidad, Alejandro Peña, ex fiscal nacional, quien debió renunciar al puesto.

Después le siguió el encargado de las licitaciones en el departamento, debido a sus responsabilidades políticas.

Las investigaciones se encaminan ahora a establecer posibles conversaciones entre otro funcionario del Ministerio y el gerente de la empresa Tecnodata.

Para el fiscal de la Unidad de Delitos de Alta Complejidad, Jaime Retamal, los hechos denunciados efectivamente revisten carácter de delito.

El fiscal agregó que "nuestro tema es absolutamente técnico y no estamos vinculando esto con ningún gobierno determinado, lo que nos interesa es determinar primero qué es lo que ocurrió con esta investigación y, si es necesario, retroceder a licitaciones anteriores".

Dada la gravedad del caso, la oposición pide ahora la salida de otros funcionarios por su responsabilidad política, como el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter y su subsecretario, Rodrigo Ubilla.

Hasta el mismo oficialismo criticó el caso. El senador Jovino Novoa, del derechista partido Unión Demócrata Independiente(UDI), dijo que si bien duda de que sea un caso de corrupción, "tiene que haber responsabilidades políticas".

Novoa agregó que "considero muy grave que durante años, el Estado de Chile haya podido estar adquiriendo insumos a precios muy superiores a los precios de mercado", sobre todo por las múltiples compras que ha hecho el gobierno chileno a la empresa Tecnodata.

Ante estas críticas, Hinzpeter defendió el actuar del gobierno en este caso, al señalar que "desgraciadamente, por sofisticado y robusto que sea un sistema, nunca es 100 por ciento inmune a los pillos o a los delincuentes", señaló.

Además, Hinzpeter defendió a su subsecretario al afirmar que "los jefes de servicio tienen muchas funciones y el subsecretario Ubilla es un funcionario particularmente minucioso y acucioso en su trabajo", dijo.

Al mismo tiempo afirmó que "yo quiero reafirmar que nosotros no vamos a tolerar hechos ni casos de corrupción y por lo tanto la responsabilidad consiste precisamente en hacer lo que se está haciendo, es asumir la responsabilidad", dijo el ministro.

Estos hechos fueron dados a conocer en uno de los peores momentos para la administración del Presidente Sebastián Piñera, que tiene una baja popularidad (un 32 por ciento de aprobación, según encuestas) y también es cuestionada por otros aspectos.

La fallida licitación de las reservas del litio, donde se cuestionó que la empresa ganadora incumpliera las bases del proceso produjo la anulación de este, sobre todo por la relación entre socios y gerentes de la firma con miembros del gobierno.

Además, el socio principal de la empresa que había ganado la licitación es hermano del ministro Hinzpeter.

También está el caso de la encuesta de caracterización socioeconómica (Casen), en la que se exageraron las cifras en la disminución de la pobreza, lo cual le generó al gobierno otra complicación.

Ahora, el gobierno de Piñera enfrenta su primer probable caso de corrupción, en un país que se ha destacado por tener los índices más bajos en esta materia en América Latina.

Fuente:XINHUA