El difícil examen de los pingüinos

Los estudiantes secundarios continuarán en el Consejo Asesor, aun cuando no confíen en él. Llamarán la próxima semana a agudizar las movilizaciones, para terminar el año como lo empezaron: en toma.

La Nación

Por Katerinne Pavez

Acorralados por el Gobierno, divididos e incomprendidos. Así se sienten los secundarios luego de una semana en la que se volvieron a tomar los colegios y los micrófonos. Esta vez, su estrategia fue desestimar el Consejo Asesor e interpelar a los parlamentarios. Pero se toparon de frente con el Ejecutivo, quien les sacó en cara los 40 días que quedan de clases y la proximidad de la PSU para exigirles que depongan sus movilizaciones. Y en esta cruzada por volver al colegio, el Gobierno tiene un aliado dentro de los propios establecimientos: los estudiantes de cuarto medio. Ellos han sido los principales opositores a las tomas.

Ayer, los pingüinos tuvieron una reunión crucial. Los dirigentes estaban tensos, preocupados. Sabían que la decisión que se tomara traería demasiadas consecuencias. Se suponía que la asamblea debía llegar a un consenso, pero terminaron a los gritos votando la resolución más importante. Cuatro regiones querían salirse y siete quedarse. Concepción se abstuvo porque su asamblea no decidió una postura.

A eso de las tres y media de la tarde comenzaron a salir los dirigentes de cada colegio convocado, con cara de frustración. La decisión de quedarse en el Consejo Asesor molestó profundamente a los representantes de la Región Metropolitana, que votaron por bajarse. Y surgieron las primeras críticas a la democracia interna. “Si la Metropolitana tiene el 60% del alumnado, debería tener otro peso”, expresó un dirigente de base. “Primó más el partido político de cada dirigente que lo que opinen las bases”, se escuchó más allá.

Pero así es la democracia, y esta vez el pueblo pingüino decidió quedarse en el consejo y seguir en toma. Y si los desalojan por la fuerza prometieron responder igual: “Las movilizaciones siguen, sabemos que el lunes pueden desalojar la mayoría de los liceos de la RM, pero dejamos claro, desde ya, que los que están en toma van a hacer frente a los desalojos”, señaló sin tapujos María Huerta, vocera nacional.

Ya por la noche, por su parte, otra de las líderes estudiantiles, María Jesús Sanhueza, dio a conocer otros anuncios de los pingüinos: habrá un paro de advertencia el próximo miércoles y le dan al gobierno un plazo de dos semanas para que dé una respuesta a sus demandas o de lo contrario “no solamente nos vamos a retirar del Consejo Asesor, sino también nos vamos a movilizar y nos vamos a tomar los colegios”.

Maria Huerta: "debemos salirnos del consejo" –¿Qué es lo mejor para el movimiento secundario, quedarse en el Consejo Asesor o retirarse? –A estas alturas ambas cosas pueden ser dañinas. Quedarse es malo porque es darle legitimidad a un ente no representativo ni democrático y que se ha demorado tres meses para resolver cosas vagas. Además, todos creen que de este consejo va a salir la solución única y eso es falso, porque los mismos parlamentarios están diciendo que lo que sale del consejo tienen que revisarlo y modificarlo. Pero salirse del consejo también tiene su lado malo: el problema de explicarle a todos por qué tomamos esa decisión. –¿Pero cuál es tu posición al respecto? –Yo creo que el asunto es que muchos gremios nos han criticado y no va a faltar el que nos va a tildar de antidemocráticos. Pero hay que pensar que cuando esos gremios necesitaron nuestro apoyo no nos criticaron y ahora se quedan en el Consejo Asesor, porque tienen su mesa propia –cosa que nos otros no tenemos– y nos critican todo. Lo que decimos, al final, es que no vamos a permanecer en el Consejo Asesor sin hacer lobby político, porque vemos que la voluntad del consejo es avanzar, pero afuera no vemos esa misma fuerza. –Los restantes miembros del consejo, sobre todo el Bloque Social (profesores, universitarios), ven como un error político que se bajen ahora. –Ellos lo ven como un error político porque quieren que les sustentemos la mesa. O sea, seamos realistas: el hecho de que se bajen los secundarios afecta y aunque traten de demostrar a los medios y a la gente que no es así, que ellos van a seguir trabajando y que nosotros somos antidemocráticos, les afecta porque esa mesa se creó gracias a nosotros y ellos están en esa mesa gracias a nosotros. Julio Isamit: "yo tengo una contradicción" –¿Bajarse o quedarse en el consejo? –El instituto siempre ha valorado al Consejo Asesor como instancia de debate, el problema está en que el primer informe es ambiguo. Por ejemplo, el consejo dice que el Estado debe involucrarse más, pero el Gobierno dice que van a seguir descentralizando a través de la municipalización; entonces, parece que el consejo no estuviera sintonizado con la realidad. –Entonces... –Algunos pensamos que el Consejo Asesor debe seguir trabajando en paralelo a la Comisión de Educación del Senado... El instituto votó por bajarse, pero yo tengo una contradicción. Para mí, lo mejor ahora sería trabajar en la comisión del Parlamento... pero igual valoro el consejo. –¿Y los estudiantes deben mantenerse en él? –Creo que si uno se queda o no, al final no hace mucha diferencia. Es que el consejo es una buena instancia de diálogo, de conversación, pero no resolverá nada porque no es su función. Creo que la discusión profunda del Consejo Asesor debe ir de la mano del debate parlamentario, queremos que los parlamentarios se pongan los pantalones en el tema. –¿Por qué están tan enojados con el consejo? –El problema es que ha sido la excusa que han usado todos. Los parlamentarios no discuten los temas “porque los está viendo el consejo’”. El Gobierno, a cada reclamo, nos dice que crearon el consejo. Entonces, uno lo odia porque para no hablar del tema todos se escudan. Lo que queremos es que no sigan escudándose y que trabajen. –¿No sería un error retirarse del consejo ahora? –Creo que dejar el consejo se puede prestar para que digan que pedimos cosas y las dejamos botadas a la mitad. Pero cuando ya hay 15 colegios en toma está claro que a los alumnos en general no les preocupa la responsabilidad que asumimos allí, y quieren soluciones más rápidas. Por eso creo que los estudiantes deberíamos ser más humildes. –¿Por qué más humildes? –Porque tenemos que aceptar que no todo lo que pedimos va a ser tal cual lo pedimos. Ya nos dieron harto en la pasada movilización. Para María Huerta, el Consejo es un "ente no representativo ni democrático y que se ha demorado tres meses para resolver cosas vagas". Datos Votación de quedarse o bajarse del consejo. Bajarse: Regiones I, III, V y Metropolitana . Quedarse: Regiones II, IV, VI, VII, IX, X y XII. Abstención de la VIII porque sus dirigentes no traían resuelto el tema desde la asamblea regional. Jorge Pavez y Nicolás Grau permanecen en la mesa, y Huerta critica su doble estándar. Los profesores tendrán una subcomisión para analizar el tema del Estatuto Docente. Las dos posturas parten del mismo diagnóstico: los estudiantes están descontentos con el trabajo del Consejo Asesor.