Blogia
T r i b u n a c h i l e n a

Venezuela: Para Avanzar en Revolución

Venezuela: Para Avanzar en Revolución
Edwin Sambrano Vidal (ARGENPRESS.info)
Empresas básicas y “control obrero”

Está sobre el tapete la discusión sobre el control obrero y su ejercicio. Qué es y qué debe ser el control obrero?... Cómo se pone en práctica?... Hacia dónde se dirige, cuáles son sus metas de corto y largo plazo?... Y, también, Cuál es su alcance en los actuales momentos?...

Pudiéramos plantear el tema con mayor dimensión, es decir, hablar no sólo de las empresas básicas propiedad de entes del Estado, sino de todas las entidades en las cuales es determinante la propiedad pública, incluso, más aún, incorporar a las empresas de capital mixto o privado. El tema es dar a los trabajadores una participación decisiva en el proceso productivo. Convertir a los trabajadores en agentes conscientes de la producción, que además de trabajar con sus fuerzas y capacidades (conocimientos, inteligencia, experiencia) sean incorporados a las decisiones, tanto de los aspectos técnicos de la producción, como de los aspectos financieros, gerenciales y sociales de la producción de bienes. Al mismo tiempo involucrar a la colectividad, en sus diferentes sectores y de acuerdo con su específica ubicación dentro de la sociedad en la decisión de los planes productivos y de los problemas y metas de la nación y sus regiones.


La gestión democrática frente a la privatización

Hace algún tiempo, a finales de la década de los 80 y durante los años 90, planteamos el tema bajo la óptica de la Gestión Democrática de las empresas estatales. Este planteamiento fue una respuesta teórica y política frente a la situación de déficits que recurrentemente presentaban estas empresas y para enfrentar los planes privatizadores del gran capital transnacional, sus socios nacionales y sus representantes políticos y académicos. Estos resaltaban las fallas del funcionamiento de las empresas de capital estatal, las cuales en Venezuela, habían experimentado un programa de crecimiento exorbitante en los últimos años (entre 1975 y 1985), desproporcionado con la capacidad de absorción de la producción por parte del mercado interno. Es la política denominada de crecimiento hacia afuera, es decir, producir materias primas o insumos industriales (productos con poco valor agregado) para exportarlos hacia las economías de mayor grado de industrialización, las cuales se aprovechan de la energía, los minerales y el bajo costo de la fuerza de trabajo contenidas en los productos para aumentar exponencialmente su valor mediante los procesos industriales más avanzados. Es una relación que condena a los países dependientes o subdesarrollados a estar a la cola de los países altamente industrializados en un círculo vicioso que con el paso del tiempo profundiza la desigualdad y las diferencias. La urgencia de la privatización fue propuesta por el gran capital cuando ya se habían beneficiado de la condición de empresas estatales al servicio del capital monopolista y se proponían desplazar al Estado de la propiedad para proseguir en la espiral de la apropiación privada capitalista de las grandes corporaciones.
El Estado capitalista ya no podía continuar la farsa de mantener una propiedad pública que estaba al servicio de la acumulación capitalista tanto a través de los negocios lícitos como por medio de la corrupción, que ha sido, en el caso de Venezuela, una fuerza imponente para una especie de acumulación originaria. Una entrega a los intereses de las grandes corporaciones transnacionales y una galopante corrupción… Cómo combatir ambas calamidades, desde una posición revolucionaria?... La propuesta del socialismo cobraba existencia con la propuesta de la gestión democrática. Es una consecuencia natural de los principios de la propiedad pública y toda la teoría del ejercicio pleno de derechos humanos, especialmente los derechos políticos, económicos, sociales y culturales. De manera que el asunto se planteaba,… Cómo hacemos productivas las inversiones de la nación y combatimos la corrupción asociada a la dominación capitalista, para impedir la privatización de la propiedad pública?...

La Gestión democrática en la construcción del socialismo

Ahora el problema se plantea con más crudeza, cuando las fuerzas revolucionarias definidas por el socialismo tienen el control del Gobierno, la Asamblea Nacional, los demás poderes públicos (Tribunales, Contraloría, Defensoría del Pueblo, Fiscalía General, Poder Electoral), la mayoría de las Gobernaciones y Alcaldías, de los Concejos Legislativos regionales y de los Concejos Municipales. En estas condiciones, además de lo anterior tenemos que plantearnos el siguiente desafío… Cómo demostramos que el ejercicio de la participación democrática es capaz de producir más riqueza social, más bienestar colectivo y más equidad?...

La Esencia del “control obrero”

El “control obrero” es una línea de acción dirigida a la participación de los trabajadores en la administración de las empresas privadas capitalistas para contener la explotación. Mientras en los casos de empresas de propiedad pública, el “control obrero” se transforma en el medio por el cual los trabajadores ejercen la propiedad que teórica y jurídicamente es de toda la sociedad para ponerla al servicio efectivo de colectividad nacional y por lo tanto para la construcción de un sistema social distinto al sistema capitalista, cuya transición llamamos socialismo. Los valores y patrones de conducta para esta tarea son totalmente contradictorios con el egoísmo, la explotación, la injusticia, el desconocimiento de los méritos de los demás, el oportunismo, la imposición arbitraria, el verticalismo.

El “control obrero” no se establece para negar los derechos que los trabajadores han alcanzado en sus luchas contra el capital y el estado capitalista, sino para reconocerlos y realizarlos plenamente. Los sindicatos, por ejemplo, son instrumentos para el ejercicio de la participación de los trabajadores en la dirección y control de las empresas. La discusión amplia, abierta y libre de los trabajadores sobre todos los temas de la producción y el uso de los excedentes, los niveles salariales, las condiciones de trabajo de cada sector y las necesidades sociales es parte esencial de la formación de la conciencia revolucionaria de las mayorías laborales. Así como las metas de la política pública, el proyecto de transformación general que implica el desempeño del gobierno nacional, regional y local, la conducta pública de los dirigentes en el cumplimiento de sus funciones. El “control obrero” no es para la entronización de una burocracia en las fábricas para hacerlas improductivas, ni para que un grupo ocupe el puesto de los explotadores capitalistas y se apropien de los beneficios y de los contactos para enriquecerse o acomodarse. Por lo contrario, el “control obrero” es para que la democratización de la gestión con la activa participación de los trabajadores o de sus representantes electos directamente por ellos bajo la condición de revocabilidad, haga posible una mayor producción, de mejor calidad y con la expansión del bienestar tanto para los que laboran en esas empresas como para la sociedad. Que no se desvíe es la responsabilidad de los revolucionarios.

0 comentarios